Leopoldo Sánchez ha sido uno de los más grandes autores europeos de finales del siglo XX. Su carrera abarca unos 30 años y empieza en la editorial valenciana Maga donde trabajaban sus primos José y Leopoldo Ortiz junto a Luis Bemejo y otros. Cursó estudios de Bellas Artes y empezó a trabajar para el mercado nacional y exterior en editoriales como Bardon Art, Fleetway, Editorial Ferma o la francesa Aredit. En los 70 colaboró con la revista Trinca para luego engrosar la lista de dibujantes españoles que colaboraron con la editorial norteamericana Warren en lo que se llamó la spanish invasion. A finales de la década vuelve al mercado español creando junto al guionista Antonio Segura la serie Bogey que acabó publicándose en Cimoc. Participó junto a Manfred Sommer, Andrés Hispano y José Ortiz en la fundación de la Editorial Metropol que publicó las revistas Metropol, KO Comics y Mocambo. Otras obras de esta época son Diario de Arena y El justiciero enmascarado. Dejó la historieta a principios de los 90 para dedicarse a la pintura y el dibujo publicitario.
Un monstruo en el espejo se publicó en la revista Comix Internacional # 3 de Toutain Editor el año 1980. La historia está basada en un relato de Oscar Wilde y la adaptación corre a cargo del propio Leopoldo Sánchez. Desconozco si se ha recopilado en álbum.
BONUS TRACK:
No puedo resistirme a incluir en este post uno de los mejores relatos breves en comic que recuerdo. Son 4 páginas memorables de la serie Bogey tituladas As time goes by que demuestran que Antonio Segura era uno de los grandes guionistas que contó el comic español en la época del Boom.
Leo Sánchez realiza aquí uno de sus mejores trabajos y juntos consiguieron que la serie fuera un referente mundial. As time goes by se publicó en Cimoc # 19 en 1981 y más tarde se recopiló en el segundo álbum de la serie, el primero que editaba Norma, titulado Archivo secreto del comisario Kelele.
3 comentarios:
Uy, se me había olvidado que Leo era primo de José Ortiz y no sobrino como yo creía. Entonces es Antonio Segura quién es el sobrino, ¿no?
Recuerdo que durante los años en que los dibujantes españoles trabajaron para la Warren, dibujaban chicas desnudas, pero para evitar problemas de censura, las dibujaban de espalds, o sino sin sexo y con senos sin pezónes, así que parecîan unas estatuas de mármol. Pepe Gonzalez hacía sólo un puntito, como para indicarnos "ahí va el pezón, chicos". La primer persona que dibujó un seno con pezón fué justamente Leopoldo Sanchez, y curiosamente pasó despercibido por la censura, pero no por los otros dibujantes. Corben inmediatamente dibujó una historia con una de sus tias bien pechugonas, con pezónes del tamaño de un plato. También pasó desapercibido (por la censura, pero nosotros los lectores).
Luego, un año después quedó Reagan de presidente, y éste trajó la Mayoría Moral, y empezaron a aparecer sostenes y bragas sobre los dibujos de las chicas, no hechos por los dibujantes, pero por algún gilipollas que no tenía ni idea de dibujar. Hasta las portadas de Playboy, en las que se veían los pezónes, tuvieron que cubrirlos en los años 80. Era hasta chistoso de ver como la revista Hustler hacía posar a sus modeles en posiciones incomodísimas para que no se viera ni un pezón y ningún rizo de pubis en la chica desnuda, jo! O mejor dicho, snif!
Diego,
desconozco lo de Segura.
Es curioso ver, curioso o dramático, que en materia de libertades el poder va dando un paso adelante y otro atrás constantemente y se está quedando atrás porque los ciudadanos, nosotros no vamos a retroceder.Lo de la censura reaganiana fue esperpéntico y los dibujantes como Corben lo sufrieron. En fin...
Saludos.
Increíble el trabajo de Leo Sánchez. Una historieta de enorme calidad gráfica..
Abrazos.
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