Francisco Solano López, uno de los genios de la historieta mundial, murió ayer a los 83 años de edad. Solano López será recordado por ser el dibujante de
El Eternauta, con guiones de
Hector Germán Oesterheld, sin embargo su carrera está llena de grandes obras.
Empezó en el mundo el comic en 1953 y en 1955 formará parte de la editorial
Frontera fundada por Oesterheld que editará revistas como
Frontera,
Hora Cero y
Ernie Pike. En esta editorial colaboraran autores como
Alberto Breccia,
Hugo Pratt,
Arturo del Castillo y el propio Solano López.
El 4 de septiembre de 1957 se empieza a publicar
El Eternauta una historia de Oesterheld que Solano López dibujará hasta su finalización en 1959. Como el dibujante había pedido,
El eternauta es una historia de ciencia ficción ambientada en Argentina y en el presente. La revolucionaria combinación de realismo y fantasía cautivará a los lectores y se convertirá en un gran éxito.
El protagonista
, Juan Salvo, explica al propio Oesterheld la invasión alienígena y la posterior resistencia por parte de unos cuantos supervivientes. Su ambientación en escenarios reales como el estadio de River Plate o la plaza Italia le darán a la obra una fuerza inaudita.
Los textos de Oesterheld, llenos de humanismo y rebeldía, y el trazo poderoso de Solano López no son nada ajenos al éxito de la serie que se convertirá en uno de los máximos exponentes de la historieta sudamericana.
Sin embargo
El Eternauta no es la única obra maestra de
Francisco Solano López.
Evaristo, un genuino comic de serie negra. que realizó junto a
Carlos Sampayo a partir de 1980 en revistas como
Superhumor y
Fierro, es su segundo gran trabajo
.
Otra vez anclados en la realidad; los autores de
Evaristo explican los casos de un comisario de la Policia Federal de Buenos Aires,
Evaristo Meneses, que desarticuló varias bandas de ladrones al final de la década de los 50 y principios de la siguiente.
Más que la narración de los casos de un policía real, la serie retrata el ambiente porteño en la época anterior a la dictadura siendo un fiel reflejo de la sociedad de la época y de las causas que desembocarán en el desplome político y moral argentino de los años 70. El trabajo de Solano López es impresionante y consigue que esta obra sea una de las más importantes de la serie negra de los 80 precursora sin duda del
boom actual del género.
A principios de los años 60 y después del cierre de la editorial
Frontera Solano López colabora con la editorial inglesa
Fleetway y realiza series como
Kelly's eye,
From the vaults of time y varios relatos bélicos.
En 1976
Hector Germán Oesterheld y
Francisco Solano López realizan una segunda parte de
El eternauta para la revista
Skorpio. La historia se situa justo después de la finalización de la primera parte y narra la lucha contra el invasor extraterrestre. Oesterheld, militante montonero por esta época, radicaliza su discurso y convierte la serie en una metáfora política del momento representando a Juan Salvo como a un líder revolucionario audaz e inflexible. En 1977 la dictadura militar secuestra y asesina a Oesterheld y a cuatro de sus hijas, convirtiéndose así en varios de los miles de desaparecidos de la dictadura militar argentina. Solano López empieza la publicación de
Slot Barr junto a
Ricardo Barreiro y emigra a España por miedo a la represión militar.
Ya en España sigue con
Slot Barr y crea series como
Ana,
Ministerio e
Historias tristes, Sus últimos años, viviendo primero en Brasil y luego en Argentina, los dedica a realizar nuevas historias de
El Eternauta, concretamente en 1997 la primera titulada
El mundo arrepentido y en 2001 una segunda parte que obvia completamente la del 1976 y que tiene una continuación titulada
En busca de Elena.
Con la muerte de
Francisco Solano López desaparece uno de los últimos testigos de una edad de oro del tebeo argentino y perdemos, además, a uno de los más importantes artistas de comic mundial. D.E.P.